IFT urge bajar costo del espectro a Hacienda.
Ampliar la conectividad habilita el derecho de acceso a internet y los servicios de telecomunicaciones.
CDMX 04 Septiembre de 2023.- El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) lleva años proponiendo a la Secretaría de Hacienda reducir el precio del espectro radioeléctrico en México, con el objetivo de impulsar la conectividad en todo el país, lograr la cobertura universal y, como consecuencia, se igualen las oportunidades de los mexicanos en mejorar su educación, tener acceso a la cultura, a la seguridad pública, habilitar el derecho de acceso a internet, los servicios de telecomunicaciones y con ello, la libertad de expresión, el derecho de acceso a la información pública, la libertad de prensa y el derecho a la justicia en línea.
Estamos a unos días de que Hacienda envíe al Congreso el paquete económico en el que incluirá cuánto tendrán que pagar los operadores de servicios móviles por el espectro radioeléctrico en 2024, y luego de realizar un estudio sobre el tema, el IFT ha sugerido dos alternativas para hacerlo:
Mantenerlo en el actual nivel sólo para América Móvil, al que considera un agente económico preponderante y, al resto de los operadores que no alcanzan el 25% de participación de mercado, reducirlo al nivel de las referencias internacionales.
El otro factor tiene que ver con ajustar, para todos, los derechos por el uso de bandas de frecuencias asignadas para servicios móviles al nivel de la referencia internacional y aplicar un esquema temporal de un pago de 1.0% de los ingresos de los operadores móviles. Ambas alternativas cuidan que no baje el nivel de ingresos de Hacienda.
El órgano regulador advierte que el monto y estructura de los derechos por uso de espectro en México constituyen una de las más importantes barreras para que los operadores móviles de menor tamaño crezcan y, de continuar el costo de los derechos anuales en los niveles actuales, se perpetúa la falta de conexión universal y la oferta en manos de unos pocos.
En las más de 50 páginas de un estudio publicado el pasado 22 de agosto, el IFT explica que el sobreprecio de 96% en el costo total del espectro (pago en la licitación y derechos anuales) profundiza las desventajas de escala entre las empresas.
Esto ha ocasionado devoluciones de frecuencias, así como que quede espectro sin asignar en el país, como la renuncia de Telefónica Movistar a sus 108-2 MHz a escala nacional en 2019 y los 6.20 MHz que tenía concesionados a AT&T. Por la falta de un buen costo de licitación del espectro, el estudio del IFT asegura que el gobierno mexicano ha dejado de percibir 13 mil 400 millones de pesos de 2020 a la fecha.
El problema de abaratar el espectro ya lo hemos estado hablando desde hace mucho tiempo con Hacienda y llevamos varios años haciendo recomendaciones para que los derechos sobre el espectro disminuyan. Básicamente este estudio se enfoca en las cuestiones de competencia y en cómo los altos costos del espectro tienen impacto en la competencia. Esto se convierte en barreras a la entrada y a la expansión, especialmente para los operadores pequeños”, explicó en entrevista Ramiro Camacho Castillo, comisionado del IFT.
Ante este escenario, vale la pena señalar que de 41 bandas de espectro que se disputaron en la última licitación, 38 se quedaron sin interesado, con lo cual se declararon desiertas. Las empresas han manifestado que no participarán en futuras licitaciones en tanto no disminuyan los costos de dicho insumo.
El IFT advierte que existe un alto riesgo de que ninguno de los competidores puedan asumir los altos costos del espectro al no alcanzar una participación mínima de 25% de cuota de mercado, que representan alrededor de 32 millones de usuarios, y que es la escala necesaria que requiere un operador móvil en México para poder cubrir las cuotas anuales de derechos de las frecuencias.
Sin embargo, analistas como Jorge Fernando Negrete, de DPL News, afirma que el artículo 6 de la Constitución determina el derecho de acceso a Internet y servicios de telecomunicaciones como un derecho fundamental, y el 28 constitucional señala que, en materia de espectro, “en ningún caso el factor determinante para definir al ganador de la licitación será meramente económico”.
La Suprema Corte señaló que “el grado de participación en el mercado no constituye un parámetro de medición del aprovechamiento o beneficios obtenidos por el espectro”. Y abunda: “el nivel de participación que los concesionarios detentan en el mercado de las telecomunicaciones, no deriva de la naturaleza del espectro, pues ello atiende a múltiples factores… como la mayor o menor eficiencia con que operan los agentes económicos en el mercado, sus estrategias comerciales o modelos de reducción de costos”.
Negrete comenta que la propuesta de asignación asimétrica, margina ciudadanos, cancela la expansión de la conectividad, destruye el valor social del espectro, no estimula la inversión, ni la eficiencia de las empresas, el despliegue de infraestructura, no da certeza jurídica a los operadores, confunde al gobierno federal, a los legisladores y hasta a los medios.
Como el fin regulatorio es la competencia económica, no hay obligaciones de cobertura. Es un beneficio a la economía del operador, entrega de valor sin nada a cambio”.
FALTA DE OFERTA
Además de los efectos negativos que tiene para la competencia en la industria de las telecomunicaciones el alto costo del espectro radioeléctrico, lo más grave es que no permite una mayor oferta de los servicios, agrega Camacho, quien se dice confiado de que Hacienda atienda las propuestas del IFT, en beneficio de la economía nacional.
Un análisis realizado por el grupo de investigación de DPL Digital Series sobre el estudio del IFT, se señala que el espectro radioeléctrico es un insumo esencial en la vida de los mexicanos y la economía nacional.
El espectro radioeléctrico es un habilitador para fortalecer la democracia en el mundo digital móvil. Pero sucede algo terrible: hay una relación directa entre su acceso, su precio y la calidad con la que se recibe conexión a Internet móvil. GSMA, la asociación de empresas de telecomunicaciones del mundo, analizó 229 operadores en 64 países. Es el estudio más robusto sobre el impacto de la política de espectro en los consumidores. Analizó el costo del espectro y su impacto en la cobertura, calidad de red y precio final a usuarios. Las conclusiones son dramáticas y ya había advertido de las mismas antes.
El Instituto Federal de Telecomunicaciones y su Consejo Consultivo fueron enfáticos en los últimos dos presupuestos federales y recomendaron a Hacienda y a la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Senadores la necesidad de bajar el precio del espectro radioeléctrico.
El espectro caro está provocando que millones de personas no accedan a servicios de banda ancha móvil o experimenten una calidad de red reducida. Con los costos alineados con la media global, cinco millones de mexicanos tendrían cobertura y los usuarios contarían con descargas de datos 30 por ciento más rápidas”, se señala en el análisis de DPL.
A ello se suma que los efectos negativos en los últimos dos años son que 40 por ciento de la población de México no está conectada a internet móvil. En junio de 2022 culminó la devolución de espectro de Movistar. México es el único país de América Latina que expulsa a operadores de telecomunicaciones y donde la cantidad de espectro asignado para servicios móviles disminuye a pesar del demoledor crecimiento en la demanda de datos.
Además, el gobierno recauda menos, los operadores no ofrecen mejores servicios, baja la inversión, no se expande la cobertura, los consumidores tienen una pésima experiencia de consumo e incluso Altán Redes necesitará más espectro.
Por: PAUL LARA